El correcto mantenimiento de un
reloj pasa por conocer su funcionamiento y ocuparse de su limpieza periódica. Además, es esencial saber
cómo darle cuerda,
un ritual diario que nos acompañará durante toda la vida. Un gesto romántico y relajante que garantiza la longevidad del reloj y
pone en marcha su mecanismo. Descubre cómo dar cuerda correctamente a tu reloj para
disfrutar de su magia y sofisticación.
Cómo dar cuerda a un reloj manual
El primer paso es identificar a qué tipo de reloj queremos dar cuerda. En el caso de los
relojes de cuerda manual,
es importante realizar la operación con
delicadeza y cuidado para no dañar la estructura o el mecanismo del reloj. El proceso empieza por comprobar
si la corona es de movimiento libre o enroscada a la caja.
• Corona de movimiento libre. En la posición en la que se encuentre, adosada a la caja del reloj y con la esfera hacia arriba, empezaremos a girarla con los dedos índice y pulgar, hacia delante o en el sentido de las agujas del reloj.
En ese momento, escucharemos el sonido del mecanismo al activarse.
• Corona enroscada a la caja. Desenroscamos la corona girándola hacia atrás, hasta que el muelle interior de posicionamiento la coloque de tal manera que podamos dar cuerda siguiendo el mismo procedimiento
que acabamos de describir para las coronas de movimiento libre.
Cuando la corona comience a ofrecer una ligera resistencia, es porque está llegando a su tope final.
Al notar este tope, debemos parar para no estropear el mecanismo. Si se trata de una corona enroscada,
la presionaremos hacia la caja y, girando hacia delante, la volveremos a enroscar para
garantizar la hermeticidad del reloj.
Cómo dar cuerda a un reloj automático
Los
relojes automáticos son
modelos mecánicos que no requieren que se les dé cuerda de forma manual,
ya que el propio movimiento de la muñeca y el brazo son suficientes para su funcionamiento.
Si un reloj automático está parado y su diseño no nos permite darle cuerda, lo que haremos será quitárnoslo de la muñeca y cogerlo en la mano, en una posición plana. A continuación, lo moveremos suavemente de izquierda
a derecha durante al menos un minuto. De este modo conseguiremos que acumule una reserva de marcha suficiente para que, una vez de vuelta en nuestra muñeca, se reanude el proceso de carga sin que el reloj se pare al poco tiempo.
La mayoría de los relojes automáticos sí permiten dar cuerda para iniciar el reloj. En estos casos, seguiremos el mismo procedimiento que con los relojes de cuerda manual, comprobando primero qué tipo de corona tienen.
La diferencia entre dar cuerda a un reloj manual y dar cuerda a un reloj automático radica en que este último no dispone de tope de final de cuerda. Por tanto, nos limitaremos a efectuar unos 20 giros de corona para proveer
a la pieza de la reserva de marcha suficiente con el fin de que, una vez colocada en la muñeca, no se detenga y continúe el proceso de carga.
Consejos para dar cuerda a un reloj
- Es mejor no manipular el reloj cuando está colocado en la muñeca. La posición de la corona complica el acceso y se podría dañar parte del mecanismo. Por eso, se aconseja retirar el reloj para darle cuerda o hacer los ajustes necesarios.
- Algunos relojes automáticos conservan su
carga durante uno o dos días, aunque no se utilicen. Sin embargo, para arrancarlos si están parados, debemos volver a darles cuerda o moverlos con cuidado para que empiecen a funcionar.
Una
caja rotora te ayudará a guardar y proteger tu reloj durante el tiempo que no tengas previsto lucirlo.
- Es recomendable dar cuerda a los relojes
todos los días a la misma hora. Puedes convertirlo en un ritual diario para disfrutar de su movimiento relajante y aprovechar para
ocuparte de su limpieza periódicamente.
- Como norma general, siempre se deben respetar las instrucciones, el manual de uso y las recomendaciones de la marca para cada modelo de reloj; y, si te queda alguna duda, consultar a los especialistas de Relojería Alemana.
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