Relojería Alemana, fundada en 1879 por el emprendedor alemán Guillermo Krug en la calle Colón de Palma, es una de las relojerías más antiguas de España. Relojería Alemana es distribuidor oficial de Patek Philippe,
la marca de referencia en Alta Relojería. La relación entre ambas firmas se inicia en la década de los años 60 y su artífice es Pablo Fuster Tarongí, hijo de Gaspar Fuster Forteza, sucesor de Guillermo Krug en la Dirección de la firma.
“Uno de los valores más importantes es que, al igual que nosotros, Patek Philippe es una empresa familiar con todo lo que ello comporta; compromiso con la calidad, emoción, tradición. Entender que sus relojes se convierten en
un legado de padres a hijos forma parte de ese círculo que solo se entiende viviendo la empresa como una familia” Estos son los valores y la afinidad entre ambas
firmas que destacan Blanca, Paula y Pablo, los miembros de la cuarta generación Fuster y actuales responsables de Relojería Alemana.
También recuerdan los Fuster con gran orgullo la edición especial del reloj World Time en la que, coincidiendo con el 135 aniversario de Relojería Alemana, se incluyó a Palma de Mallorca como ciudad de referencia en el
anillo de los husos horarios. De este reloj se manufacturaron 2 series exclusivas.
Una anécdota de gran significado fue cuando un coleccionista español insistió y consiguió adquirir el reloj cumbre del catálogo de Patek, el primer Sky Moon Tourbillon ref. 5002 comercializado en España, en el propio establecimiento de
la firma mallorquina. Hasta entonces los clientes que optaban y se les aprobaba la venta de este excepcional reloj, debían desplazarse personalmente a los Salones Patek Philippe de Ginebra para adquirirlo
Otra prueba de la excepcional relación entre Relojería Alemana y Patek Philippe es que pueden presumir de haber dispuesto y vendido el primer reloj de pulsera Patek de producción regular con la complicación de Gran Sonería,
una obra maestra que albergaba en su interior nada menos que 20 complicaciones.